América y el indulto

ACTUALIDAD Repasamos los datos de febreroAmérica y el indulto01/03/2016 19:01

 Mérida, siempre un filón en indultos, Guadalajara, Lenguazaque…

 Enrique Ponce, Alejandro Talavante, Curro Díaz, El Conde, El Califa de Aragua…

 Los Ramírez, Los Arángüez, Los Encinos, Juan Bernardo Caicedo…

Aqui va pie de foto I GERMÁN D’ JESUS CERRADA

MUNDOTORO > Madrid

Sigue el ritmo, sigue la tendencia. Continúa ampliándose la lista de toros y novillos indultados en este aún joven 2016, como ya se vio en enero. Febrero, mes intenso en su primera quincena, ha dejado un buen puñado de pañuelos naranjas y de nuevas vidas ganadas en la arena.

Febrero es, al menos este año, Carnaval. Carnaval es, entre otras muchas cosas, Mérida (Venezuela). Y Mérida es sinónimo de indultos. Su ambiente festivo se concreta en numerosos éxitos para toreros y ganaderías. Este año no iba a ser excepción. Entre esos triunfos resonantes, el de Alejandro Talavante, que indultó a ‘Frontero’, de Rancho Grande el 6 de febrero.

Pero hubo mucho más. Porque el lunes 8 Enrique Ponce y El Califa de Aragua protagonizaron, junto al hierro de Los Ramírez, un hecho siempre llamativo: un doble indulto. Fueron el tercero y el cuarto toros los ‘perdonados’ en un espectáculo histórico en el coso venezolano. Y qué mejor remate al ciclo que con otro indulto. Jonathan Guillén cerró feria el 9 de febrero en Mérida logrando el perdón para un toro de Los Arángüez.

Interior del Nuevo Progreso de Guadalajara I MUNDOTORO

No todo fue Mérida, claro está. Por ejemplo en Lenguazaque (Colombia) se repitió el suceso del doble indulto. Fue el domingo 7 y sus protagonistas, Curro Díaz, el nacional Sergio Blanco y los astados de Juan Bernardo Caicedo.

Aunque el gran triunfo por la categoría de la plaza llegó el segundo domingo del mes, día 14. En el sobrero de regalo de un festejo que se consumía, El Conde se entendió con ‘Tapatío’ de Los Encinos en la exigente plaza mexicana de Guadalajara.

Otras plazas, de menos resonancia pública, también vieron el triunfo de la vida en el ruedo. Es el caso del coso azteca de Ixtapán, donde El Maletilla indultó a un astado de Celia Barbabosa. O el colombiano de Toledo, en el que Sebastián Vargas paseó dos orejas simbólicas de uno de El Capiro de Sonsón. O, incluso, el Rancho del Tío Pepe en Ambato (Ecuador), escenario donde el novillero Juan Carlos Villegas logró los máximos trofeos de un utrero de San Pablo de Ecuador.