Y del sexo puro y duro a la política, siempre presente año tras año. La fiesta más politizada y sexuada mientras que en Fallas o en la de Abril pasan, los otros dos colosos de las fiestas de España. Que si la ikurriña sí o no, que si el 6 puesta en el balcón del Ayuntamiento minutos antes del chupinazo y discusiones después, que si bronca y aplausos al alcalde en la plaza de toros, que si silencios por el mozo muerto a tiros en el 68, que si encierros sí y corridas no…




Ricardo Díaz-Manresa
Sanfermines 2017, los más paganos y los más religiosos en este mes y año. Divinos y humanos. Y con el toro como gran bandera.

Cada vez más universales, turísticos, musicales, espirituales, paganos y politizados al máximo. Como ninguna otra fiesta de España. Y la más religioso-taurina de todas.
Pero han sobresalido como nunca en muchos años por la religiosidad (que aumentó) y por el tema de las agresiones sexuales. Los sanfermines del 17 o los de la religión y el sexo.
Encierros espirituales que son entrega al espíritu de la tradición , la cultura y la ofrenda de la vida, si es necesario, por correr ante un toro en las calles para que Pamplona siga siendo la gran fiesta mundial de España, la primera.

Tan universales que hoy hemos visto en la espléndida retransmisión de TVE conexiones con todos los lugares del mundo desde uno uno vestido de pamplonica en la Plaza Roja de Moscú a las 7 y media de la mañana esperando el encierro a argentinos y mexicanos, con el horario cambiado y hasta los militares españoles en la zona de conflictos internacionales.

El mundo entero pendiente del toro de Pamplona. Viendo todos los días por la Uno a la también espléndida Elena Sánchez bordándolo. Y a su lado, Javier Solano, un buen complemento por ser la voz de la experiencia pamplonica y espectador y actor de muchos encierros. La competente presentadora además ha demostrado que sabe de toros, que está al tanto de la actualidad de las ferias y de la historia y vida de las ganaderías. Que le interesa el tema y es aficionada poniendo los ejemplos adecuados en cada momento para defender la tauromaquia de este siglo. Todo un hallazgo de competencia y simpatía.

Música por todas partes, gente a reventar pero con un 15 por ciento de plazas libres en los hoteles. Será por los precios porque el tirón pamplonica sigue intacto. Pero antes, a precios más razonables, teníamos que hacer las reservas de un año para otro. Te ibas de Pamplona con la habitación asegurada para los sanfermines siguientes.

Y se ha vuelto más pagana. Vino a raudales y comida para hartar, …Y SEXO. En ninguna parte se habla tanto de sexo como en Pamplona. Nunca se ha hablado tanto. Han estado todo el año dando vueltas a la violación en 2016 y sacando por televisión a los agresores no sé cuántas veces.
No quieren que en el 17 sea la capital mundial de las agresiones sexuales y en estos sanfermines ya ha habido juicios express por el tema, creo que siete. Hay campañas masivas para decir que no, stands para las denuncias, mano diciendo stop en las camisetas, etc En radio, televisión, periódicos, Ayuntamiento etc etc.

La concejal de igualdad no paraba de conceder entrevistar como lideresa de la causa.
Daba la impresión de que se habían juntado en Pamplona todos los salidos del mundo. O es el vino mal bebido más que en otras fiestas o creerse que todo el monte es orégano. La sexualidad consentida o no denunciada debe ser enorme.

Y del sexo puro y duro a la política, siempre presente año tras año. La fiesta más politizada y sexuada mientras que en Fallas o en la de Abril pasan, los otros dos colosos de las fiestas de España. Que si la ikurriña sí o no, que si el 6 puesta en el balcón del Ayuntamiento minutos antes del chupinazo y discusiones después, que si bronca y aplausos al alcalde en la plaza de toros, que si silencios por el mozo muerto a tiros en el 68, que si encierros sí y corridas no…

Y mucho euskera. Antes no había y San Fermín ha tenido que aprenderlo salvo que en el cielo todos sean políglotas. Política y más política mientras que la taurina Casa de Misericordia sigue ejemplar.
Las más taurinas, las más paganas, las más politizadas, las más espirituales y las más religiosas. Ninguna como ésta. San Fermín es el santo más taurino del mundo.
Tres veces diarias le piden los mozos guía y protección para el encierro. Se habla continuamente del capotico o capotillo santo y mágico de San Fermín (el santo que más quites hace en el mundo), y se ven muchos mozos rezando antes de correr y apretando rosarios y cruces y besando cruces y alguna camiseta con Cristo.

Los minutos previos al encierro son una cataratas de ruegos al cielo. Y la procesión tan espectacular, y su nombre continuamente en boca de tantos. San Fermín, San Fermín.
El santo más torero, más que San Isidro, con su famosísima feria, más que San Pedro Regalado, el patrón de los toreros. Y hasta San Pedro Apóstol que debería serlo porque cortó la primera oreja y oyó los tres primeros avisos, los más amargos de la Historia. Primer Papa y torero.

Y además todos los 9 de julio, siempre en plenos sanfermines , el día de Santa Verónica…







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